La administración avanza en su promesa de campaña para devolver el control educativo a los estados.
La administración Trump ha dado el primer paso hacia la eliminación del Departamento de Educación, una de sus promesas clave de campaña. Altos funcionarios del gobierno han comenzado a circular un borrador de orden ejecutiva que solicita un plan para desmantelar la agencia y devolver el control de la política educativa a los estados.
Aunque la orden en sí no desmantelaría inmediatamente el departamento, sí instruye al secretario de Educación a elaborar una estrategia para su eliminación progresiva. Además, se pedirá al Congreso que apruebe una legislación para formalizar el cierre definitivo de la agencia.
Elon Musk y la cruzada contra el gasto gubernamental
El esfuerzo por reducir el Departamento de Educación cuenta con un actor clave detrás de escena: Elon Musk. Desde el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), Musk ha estado trabajando en formas de recortar la burocracia y reducir el gasto público mediante medidas ejecutivas.
Según informes de The Washington Post, el DOGE ya ha identificado áreas dentro del Departamento de Educación donde podrían realizarse recortes inmediatos, incluyendo la reversión de políticas impuestas durante la administración de Joe Biden, como la condonación masiva de préstamos estudiantiles.
DEI: La primera víctima de la reforma
Uno de los primeros pasos de la administración en este proceso ha sido la eliminación de las iniciativas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) dentro del Departamento de Educación.
Por orden de la Oficina de Personal y Gestión de la Casa Blanca, docenas de empleados de la oficina de accesibilidad DEI han sido suspendidos y puestos en licencia administrativa remunerada, como parte del cierre de todas las iniciativas relacionadas con este programa ideológico.
Un documento interno obtenido por medios estadounidenses instruye a todas las agencias gubernamentales a “notificar a todos los empleados de las oficinas de DEI que se les colocará en licencia administrativa con efecto inmediato mientras la agencia toma medidas para cerrar/finalizar todas las iniciativas, oficinas y programas de DEIA”.
Linda McMahon y la reestructuración educativa
Si bien la orden ejecutiva aún no ha sido firmada, fuentes dentro de la Casa Blanca indican que Trump esperaría hasta la confirmación de su candidata para el Departamento de Educación, Linda McMahon.
McMahon, cuya nominación está en pausa en el Senado a la espera de la revisión de documentos de ética, será clave en la implementación de los primeros recortes y en la planificación del cierre definitivo de la agencia.
Algunos asesores dentro de la administración creen que Trump debería esperar a que McMahon asuma el cargo antes de firmar la orden ejecutiva, para evitar dar a los senadores demócratas un pretexto para bloquear su nominación.
¿Por qué desmantelar el Departamento de Educación?
El movimiento para eliminar el Departamento de Educación responde a una visión de largo plazo dentro del movimiento conservador: devolver el control educativo a los estados y eliminar el adoctrinamiento progresista dentro del sistema escolar.
Desde su creación en 1979, el Departamento de Educación ha crecido en tamaño y alcance, imponiendo regulaciones y estándares nacionales que han limitado la autonomía estatal en la educación.
Trump y otros líderes republicanos han argumentado que las políticas educativas deben ser manejadas a nivel local, permitiendo que los estados y distritos escolares tomen decisiones sin interferencia federal.
Además, la administración ha señalado que el Departamento de Educación se ha convertido en un vehículo para imponer ideologías progresistas en las escuelas, promoviendo iniciativas como:
- Programas DEI en el currículo escolar
- Enseñanza de teorías críticas de raza y género
- Políticas de préstamos estudiantiles que incentivan la dependencia estatal
El camino por delante
Si bien Trump tiene la autoridad para ordenar la reducción del Departamento de Educación mediante medidas ejecutivas, su desmantelamiento completo requerirá una legislación del Congreso.
Los republicanos controlan la Cámara de Representantes, lo que podría facilitar la aprobación de una ley en este sentido, pero el Senado aún representa un obstáculo. Con una ligera mayoría demócrata, la oposición intentará bloquear cualquier intento de cerrar el departamento.
Sin embargo, la Casa Blanca podría presionar para realizar recortes significativos mientras se busca el apoyo necesario en el Congreso.
“Trump no necesita eliminar el departamento de inmediato para cumplir su promesa. Puede desmantelarlo progresivamente, eliminando su influencia y reduciendo su capacidad de imponer regulaciones a los estados”, indicó un alto funcionario de la administración.
Conclusión
El proceso de eliminación del Departamento de Educación ha comenzado, con una combinación de órdenes ejecutivas, recortes presupuestarios y presión legislativa.
Con Elon Musk liderando el esfuerzo de reducción del gasto gubernamental y la eliminación de las iniciativas DEI como primer gran paso, Trump está enviando un mensaje claro sobre su visión para el futuro de la educación en EE.UU.
Lo que está en juego no es solo la descentralización del sistema educativo, sino también el fin de décadas de intervención federal y adoctrinamiento progresista en las escuelas.
El debate sobre el futuro del Departamento de Educación apenas comienza, pero una cosa es segura: la administración Trump está decidida a cambiar radicalmente la forma en que se maneja la educación en Estados Unidos.
⨀ Daniela Reins-Ramos, periodista, colaboró en la redacción de este artículo de manera exclusiva para Hombres Sabios Magazine.
