La procuradora general Pam Bondi ordenó la suspensión inmediata de la financiación federal a las llamadas “ciudades santuario” y a las ONG que asisten a inmigrantes ilegales. Según Bondi, estas jurisdicciones están en abierta violación de la ley federal al obstaculizar la aplicación de las normas migratorias. Además, el Departamento de Justicia demandó a Chicago e Illinois por su política de santuario, intensificando el enfrentamiento entre el gobierno federal y las administraciones locales que desafían la ley.