Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Antony Blinken y el legado de Gaza: críticas y protestas

"United States Secretary of State Antony Blinken visits Israel on October 22, 2024 - 20" by U.S. Embassy Jerusalem is licensed under CC BY 2.0.
Puedes compartir esta historia:

El apoyo de EE. UU. a Israel en Gaza sigue generando acusaciones de violaciones legales y éticas contra la administración Biden.

La devastadora ofensiva de Israel en Gaza y el apoyo continuo de Estados Unidos a la misma han colocado al secretario de Estado saliente, Antony Blinken, en el centro de una tormenta de críticas. Según Hala Rharrit, una ex diplomática estadounidense que renunció en protesta, este controvertido respaldo “perseguirá” a Blinken por el resto de su vida.

En una entrevista con Al Jazeera, Rharrit aseguró que la administración de Joe Biden ha eludido deliberadamente las propias leyes estadounidenses al continuar suministrando armas a Israel, a pesar de los abusos documentados en Gaza. “Están violando y evadiendo deliberadamente la ley estadounidense”, afirmó, subrayando que el flujo continuo de armamento es tanto “imperdonable” como “criminal”.

Rharrit, quien renunció al Departamento de Estado en abril, criticó la falta de respeto hacia normativas clave como la Ley Leahy, que prohíbe la asistencia militar a fuerzas responsables de graves violaciones de derechos humanos. A esto se suma el Memorando de Seguridad Nacional N.º 20, que exige garantías de que las armas estadounidenses no se usen en violación del derecho internacional humanitario, una directiva que parece haber sido ignorada en el caso de Israel.

Un historial de abusos ignorados

Organizaciones de derechos humanos han señalado que Israel está cometiendo crímenes graves en Gaza, incluyendo genocidio, según informes recientes. Más de 46,000 personas han muerto en el territorio, que además enfrenta un asedio que ha desatado una crisis de hambre. En 2024, la Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el exministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra, entre ellos el uso del hambre como arma de guerra.

A pesar de estas acusaciones, Antony Blinken ha certificado repetidamente ante el Congreso que Israel no está bloqueando la ayuda humanitaria en Gaza, un punto que organizaciones de ayuda humanitaria han refutado vehementemente. Esto ha llevado a demandas legales y protestas públicas que acusan a la administración Biden de complicidad en crímenes de guerra.

Imagine.art

Protestas y un legado polémico

El papel de Blinken en las decisiones de política exterior relacionadas con Gaza ha provocado reacciones enérgicas. Desde activistas interrumpiendo sus discursos en foros públicos hasta periodistas cuestionando agresivamente su manejo del conflicto, las críticas hacia su figura no cesan. Algunos manifestantes incluso lo han llamado el “secretario del genocidio”.

En sus últimos días como secretario de Estado, Blinken ha enfrentado un aumento de la presión, incluyendo una demanda liderada por palestinos que acusa a su administración de ignorar las disposiciones de la Ley Leahy. Para Hala Rharrit, estos episodios son un reflejo de la indignación moral que suscitan las acciones del gobierno estadounidense en Gaza.

“Es natural oponerse a las masacres y a los asesinatos de seres humanos”, declaró Rharrit. Además, señaló que Blinken será recordado por su papel en la guerra en Gaza, no solo por los activistas, sino también por la historia. “La pregunta es: ¿habrá rendición de cuentas por los crímenes cometidos durante esta administración?”, cuestionó.

El futuro de Gaza y el rol de Estados Unidos

Aunque se alcanzó un acuerdo de alto el fuego en Gaza esta semana, el conflicto ha dejado cicatrices profundas. Funcionarios israelíes, como el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, se han jactado de haber bloqueado acuerdos de paz anteriores. Por su parte, Blinken ha culpado a Hamás de sabotear las negociaciones, una afirmación que exdiplomáticos como Rharrit consideran falsa.

Tras 18 años de servicio en el Departamento de Estado, Rharrit expresó su alivio por haber renunciado. Según ella, las políticas estadounidenses en Gaza son contradictorias con los intereses de seguridad nacional y con los principios humanitarios que se espera que defienda la diplomacia. “No creo que los diplomáticos estén destinados a implementar políticas ilegales o inhumanas”, afirmó.

Con Antony Blinken dejando su cargo y un nuevo gobierno en el horizonte, la cuestión de la responsabilidad por la guerra en Gaza permanece en el aire. Sin embargo, para críticos como Rharrit, la historia ya está pasando factura.

⨀ Foto: “United States Secretary of State Antony Blinken visits Israel on October 22, 2024 – 20” by U.S. Embassy Jerusalem is licensed under CC BY 2.0.