Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Nicaragua: entre los países más peligrosos para cristianos

"Daniel Ortega, Presidente de Nicaragua recibe a delegación del Ecuador" by Cancillería Ecuador is licensed under CC BY-SA 2.0.
Puedes compartir esta historia:

La represión religiosa en Nicaragua, encabezada por Daniel Ortega, ubica al país entre los más peligrosos para cristianos, según el Índice Global de Persecución Religiosa.

Nicaragua se ha convertido en uno de los 20 países más peligrosos del mundo para los cristianos, según el Índice Global de Persecución Religiosa de International Christian Concern (ICC). La represión del régimen de Daniel Ortega contra los grupos religiosos no es un evento aislado, sino parte de un ataque generalizado contra las libertades civiles en la nación centroamericana.

“Como ocurre en muchos países comunistas, Nicaragua ha llegado a considerar la religión como un enemigo del Estado”, afirma el informe de ICC. El presidente Ortega, junto a su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, ha liderado una ofensiva contra la Iglesia, a la que califican de subversiva frente a sus aspiraciones de poder absoluto.

La persecución se intensificó en 2018, cuando la Iglesia Católica intentó mediar entre el gobierno y los manifestantes antigubernamentales. Desde entonces, las represalias se han extendido, convirtiéndose en un ataque masivo contra la libertad religiosa.

El gobierno de Ortega ha cerrado más de 1.100 entidades religiosas, detenido a más de 70 personas por motivos de fe y forzado al exilio a 84 sacerdotes. Las actividades religiosas están estrictamente controladas, incluidas las procesiones de Semana Santa y las celebraciones navideñas. Asimismo, se ha prohibido incluso rezar en los cementerios.

La represión no se limita a restricciones legales. Las propiedades de las iglesias han sido confiscadas, sus cuentas bancarias congeladas y sus medios de comunicación clausurados. Paramilitares leales al régimen han profanado iglesias, saqueado lugares sagrados y realizado ataques incendiarios.

Imagine.art

En un gesto que subraya la gravedad de la situación, Ortega cerró la embajada del Vaticano en Managua en 2023 tras la comparación del Papa Francisco entre su gobierno y una dictadura. Para 2024, disolvió la Diócesis Episcopal de Nicaragua junto con otras 92 organizaciones religiosas.

“El ataque de Ortega contra la religión busca aplastar la disidencia y desmantelar espacios de esperanza y comunidad”, afirmó el Papa Francisco durante una oración del Ángelus, destacando la persecución a obispos y sacerdotes.

Más allá de la religión, el régimen de Ortega y Murillo ha desmantelado sistemáticamente las instituciones democráticas, cerrado universidades, clausurado organizaciones sin fines de lucro y silenciado a la prensa independiente. Desde 2018, más de 5.000 organizaciones, incluidas la Cruz Roja y Save the Children, han sido cerradas.

En un país donde el 80 % de la población se identifica como cristiana, el ataque del gobierno contra la fe refleja su estrategia para consolidar el poder, dejando a los nicaragüenses con cada vez menos espacios de resistencia y esperanza.

⨀ Foto: by Cancillería Ecuador is licensed under CC BY-SA 2.0.