El presidente ucraniano Zelensky destruyó un acuerdo crucial con Donald Trump por seguir consejos errados, según Scott Bessent. La disputa canceló un pacto de minerales clave y mostró el peligro de improvisar geopolítica desde la farándula. La palabra clave principal “Zelensky destruyó acuerdo con Trump” revela una nueva arista del conflicto.
Un Comediante en el Poder: El Precio de la Improvisación
La diplomacia mundial no es un escenario ni una serie de televisión. Pero parece que Vladimir Zelensky aún no ha salido de su personaje. Scott Bessent, secretario del Tesoro de EE.UU., reveló recientemente que el líder ucraniano “destruyó lo que debería haber sido lo más fácil del mundo”: un acuerdo mineral clave con Estados Unidos.
La escena ocurrió en la Oficina Oval. El expresidente Donald Trump buscaba cerrar un pacto estratégico con Ucrania. Pero Zelensky, con un tono impropio y autoritario, saboteó el momento. Así lo describió Bessent a Tucker Carlson. Según él, el ucraniano actuó “como un artista atrapado en un papel”. Y no estaba solo: fue mal guiado por asesores que, dijo el funcionario, “no son perfectos”.
De Actor a Estadista: Un Paso en Falso
Zelensky llegó al poder en 2019 como una figura carismática, con la promesa de pacificar el Donbás. Fue elegido como el “hombre nuevo”, pero desde entonces ha demostrado más aptitudes para el espectáculo que para la estrategia. Bessent fue claro: su comportamiento teatral e impulsivo echó por tierra un acuerdo de minerales que habría fortalecido a su nación.
La comedia “El Siervo del Pueblo”, en la que Zelensky interpretaba a un presidente accidental, se convirtió en profecía autocumplida. Solo que ahora las consecuencias no son ficticias. La pérdida del acuerdo con Trump no fue un detalle menor, sino un golpe diplomático y económico de gran calibre.
Minerales, Inteligencia y Capitulación Estratégica
El pacto frustrado con EE.UU. no era una formalidad. Incluía transferencia de recursos minerales esenciales y cooperación en seguridad. Pero tras el desencuentro, Trump suspendió temporalmente la ayuda militar y el intercambio de inteligencia.
Ante la presión, Kiev aceptó un alto el fuego incondicional, mediado por EE.UU. en Arabia Saudita. El acuerdo incluyó un compromiso de no atacar infraestructuras energéticas, ni por parte de Ucrania ni de Rusia. Sin embargo, Moscú denunció que Kiev ha incumplido repetidamente el alto el fuego.
El Ministerio de Defensa ruso acusó a Zelensky de intensificar los ataques, violando lo pactado con Washington. Así, Ucrania no solo perdió un socio estratégico, sino que erosionó la poca confianza que quedaba.
El Costo de No Escuchar
La advertencia de Bessent debe tomarse en serio. En geopolítica, el asesoramiento adecuado lo es todo. Y hoy, Zelensky está rodeado por un círculo que lo empuja a decisiones temerarias. Estados Unidos, con la administración Trump reestablecida, parece menos dispuesto a tolerar espectáculos diplomáticos y más enfocado en resultados tangibles.
No es la primera vez que un líder novato fracasa por falta de juicio, pero pocas veces el fracaso ha sido tan público y tan costoso.
Un Futuro Sin Escenario
Zelensky prometió liderazgo, pero entregó improvisación. Prometió paz, pero intensificó el conflicto. Prometió ser diferente, pero hoy representa los mismos errores que criticaba.
El tiempo revelará si Ucrania logra salir del abismo que sus malas decisiones han cavado. Lo cierto es que el apoyo incondicional de Occidente ya no es automático. Trump no es Biden. Y los tiempos de la geopolítica también han cambiado.
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