Mientras el mundo celebra el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, las Naciones Unidas avanzan silenciosamente en su propia agenda: un sistema de identificación digital obligatorio, censura masiva y vigilancia estatal bajo el pretexto de combatir la “desinformación”. Bajo el disfraz de un “futuro sostenible”, la ONU promueve herramientas de control que podrían convertir a la humanidad en esclava del globalismo digital.
El Nuevo Orden Digital: Control Total O Nada
La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales ha sido un respiro para quienes creen en la libertad de expresión y la soberanía nacional. Sin embargo, mientras los ojos del mundo estaban en la Casa Blanca, las Naciones Unidas trabajaban en segundo plano para imponer un régimen de control digital sin precedentes.
Según un informe de Reclaim the Net, un comité de la ONU ha aprobado dos resoluciones que avanzan en su agenda globalista, con énfasis en identificación digital, censura y vigilancia masiva.
Entre las iniciativas aprobadas está la creación de un sistema de identificación digital vinculado a cuentas bancarias y redes sociales, lo que permitiría a los gobiernos rastrear y castigar a quienes difundan “desinformación”.
Censura Y Control: Las Naciones Unidas Van Con Todo
La ONU ha dejado claro que quiere “fortalecer alianzas con medios tradicionales y digitales” para combatir lo que ellos llaman “discurso de odio”. En otras palabras, están sentando las bases para una colaboración global entre gobiernos, corporaciones tecnológicas y medios de comunicación para controlar lo que la gente puede decir, leer y compartir.
Bajo la bandera de la “lucha contra la desinformación”, la ONU ha establecido varios objetivos preocupantes:
- Vincular la identidad digital con las cuentas bancarias.
- Implementar un sistema de censura algorítmica que elimine contenido no aprobado.
- Promover leyes de “protección contra la desinformación” en países miembros.
- Desarrollar herramientas de vigilancia digital masiva.
El representante de Italia apoyó el uso de inteligencia artificial para censurar contenidos no deseados, mientras que el del Reino Unido calificó la desinformación como una “gran amenaza”, justificando más medidas de control.
¿El Futuro De La Libertad? Un Banco Conectado A Tu Identidad Digital
La resolución de la ONU, según Reclaim the Net, no se detiene en la censura. También busca vincular la identidad digital con las cuentas bancarias, asegurando que cualquier persona que se atreva a desafiar la narrativa oficial pueda ser bloqueada económicamente.
Esto permitiría a los gobiernos cerrar cuentas bancarias de “infractores”, congelar fondos y evitar que los disidentes puedan operar en la economía formal.
La justificación para este nivel de control es que ayudará a evitar el fraude y el acceso ilegal a servicios sociales. Pero en la práctica, significa que tu derecho a usar tu propio dinero dependerá de que el gobierno esté de acuerdo con lo que dices en línea.
El representante de Pakistán fue aún más lejos, sugiriendo “censura y desmonetización mediante algoritmos”. En otras palabras, quienes sean etiquetados como disidentes digitales no solo perderían su voz, sino también su capacidad de subsistir.
El Reino Unido Y Su Inclinación Por La Censura
No es casualidad que el Reino Unido esté impulsando este tipo de medidas. Su Proyecto de Ley de Seguridad en Línea otorga poderes de censura sin precedentes al Estado y a la Oficina de Comunicaciones (Ofcom).
Este marco legal permite al gobierno:
- Determinar qué información es “peligrosa” y debe ser eliminada.
- Imponer multas y restricciones a plataformas digitales que no censuren a tiempo.
- Forzar a empresas privadas a entregar datos de usuarios considerados “problemáticos”.
Es evidente que la ONU y sus aliados globalistas están coordinando una ofensiva sin precedentes contra la libertad de expresión, utilizando la excusa de la seguridad y la estabilidad social.
“Discurso De Odio”: La Excusa Perfecta Para Controlarlo Todo
Uno de los puntos más problemáticos de esta resolución es su definición subjetiva del “discurso de odio”.
El representante de Argentina expresó su preocupación de que esta etiqueta podría ser usada para suprimir el debate político legítimo. Sin embargo, su advertencia no tuvo efecto y la resolución fue aprobada de todos modos.
Esto significa que cualquier crítica al globalismo, a la ONU, o incluso a ciertos gobiernos, podría ser clasificada como discurso de odio y eliminada automáticamente.
De La Teoría A La Práctica: ¿Qué Tan Lejos Estamos?
Algunos podrían argumentar que estos planes de la ONU son meras propuestas que nunca se implementarán. Pero los hechos demuestran lo contrario:
- Canadá ya está implementando regulaciones de censura con el proyecto de ley C-11.
- El Reino Unido ha aprobado su Proyecto de Ley de Seguridad en Línea.
- La Unión Europea ha impuesto restricciones a los “contenidos dañinos” en redes sociales.
- Bancos y empresas tecnológicas ya han congelado cuentas de personas con opiniones “controversiales”.
Esto no es una teoría conspirativa. Es un plan en marcha.
Conclusión: El Globalismo No Se Rinde, Y Nosotros Tampoco
La ONU ha dejado claro su objetivo: un sistema de control digital total que abarque identidad, finanzas y expresión en línea. Cada palabra, cada transacción y cada interacción en internet estará bajo vigilancia.
Si este modelo se consolida, no habrá escapatoria del control del globalismo. No será necesario que el Estado envíe agentes a tu casa: bastará con apretar un botón y desaparecerás digitalmente.
El hecho de que Trump haya regresado al poder en EE.UU. es un respiro, pero no significa que la batalla haya terminado. Las élites globalistas seguirán avanzando con su agenda, y la única manera de detenerlas es exponiendo sus planes y defendiendo la libertad de expresión.
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La lucha por la libertad sigue.
