El Pentágono ha iniciado una investigación sobre filtraciones de seguridad nacional, vinculadas al uso del polígrafo por el Departamento de Defensa. En el contexto del gobierno de Donald Trump, estas medidas se suman a un esfuerzo más amplio por erradicar las divulgaciones no autorizadas. La polémica incluye el caso Musk y refleja una ofensiva contra los tentáculos globalistas en las instituciones.