Milorad Dodik, líder serbio bosnio, desafía abiertamente al poder judicial de Bosnia y a la injerencia occidental. Ignorando una citación federal, afirma que la República Srpska no será una colonia. Condenado a un año de prisión y apartado del cargo, cuenta con el respaldo de Serbia y Hungría en su lucha por la autonomía. ¿Un patriota o el nuevo villano del globalismo?

